VIVIRÉ ESTE DÍA….

Hay días que las cosas no salen bien… por andar a prisa, con la mente en otra parte, desesperados, angustiados, con necesidad de hablar con alguien aunque sea un desconocido, no hacemos las cosas bien…

Algo falla en el trabajo, lo resolvemos mal, respondimos de manera equivocada a alguien que ni vela tiene con lo que nos pasa, nos equivocamos al llamar por no poner atención a las instrucciones, iniciamos algo o terminamos algo y queremos hacerlo de la mejor manera posible, pero de antemano sabemos que algo no saldrá bien… pero ahí estamos haciendo las cosas decididos.

El animo se nos va y la fuerza aminora… que hacer entonces…. Y no hay mas que hacer una pausa relajar los músculos contraídos, respirar profundo y tomar la decisión de hacer las cosas bien… de manera honesta, de manera pacífica de manera organizada y alejada de dudas y temores.

Uno va recobrando fuerza y ánimo, la vida no se termina por un mal día, porque sabemos que solo es una probadita de lo mucho que nos falta aún por vivir.

En momentos sensibles y de presión, no hay más que hacer…. Apechuga, asimila y avanza, porque detenerse solo es para agarrar viada y seguirle derechito por el camino que se haya elegido, afrontando problemas, cumpliendo metas y planteando nuevas.

Hay que decidir animarnos hoy aunque del cielo este nublado… hay que reconocer que las decisiones tomadas fueron razonadas y contra eso no hay vuelta atrás… se ha dicho.

Y también hay que agradecer por el respeto a las decisiones tomadas y por la paciencia que nos tuvieron mientras estuvimos en ese transe, en ese proceso de elegir.

Hoy le agradezco al universo y a ti ese espacio para vivir esta historia.

Y como diría una frase que mi papá decía con mucha frecuencia… viviré este día como si fuese el último de mi existencia… y si no lo es. Daré gracias.