Hay días las que las cosas no salen para nada bien… pareciera que una maldición se nos vino encima, que amanecimos con el pie izquierdo, que el universo conspira en nuestra contra, en fin, días en que por presión y cargas que si analizamos bien no son tan pesadas, simple y sencillamente no funcionamos como es debido.
Afortunadamente para nosotros pero para desgracia de otros, nuestros días malos jamás se podrán comparar con los de quienes de verdad la están pasando mal, o como día mi hermano, “siempre hay uno mas amolado que nosotros”; pero es esa costumbre nefasta de maximizar las cosas y decir, ¡¡¡ no hay peor desgracia que la mía!!! o ¡¡¡ maldita suerte ¡!!, nos llega de mal humor y lo único que conseguimos es atraer más y más y más problemas, por que al no ocupar nuestra mente en lo realmente importante, vivimos el día, o la semana, o los meses o los años, lamentando nuestras desgracias, nuestras represiones, nuestras necesidades y hasta nuestra vida, como si esta no fuera tan valiosa como para agradecerle aunque sea de vez en cuando lo que nos ha brindado.
No puedo entender como hay personas que viven así por siempre, mis respetos pero se pierden la oportunidad de poder gozar del día a día, de las cosas magnificas que el mundo tiene y que la gente puede ofrecernos.
Momentos o días malos los tendremos siempre, hasta que seamos capaces de enfrentarlos y manejarlos con la debida conciencia de que en ellos no se basa nuestra existencia, son solo instantes en los que la situación se nos salió control, voluntaria o involuntariamente….
Cuando estos problemas han sido motivados por circunstancias externas uno, pues no queda más que esperar a que las cosas se encaucen y tomen su ritmo para entrar en acción, talvez será necesario acelerar el paso para poder cumplir las metas y salir a flote con obligaciones establecidas.
Pero cuando todo ese vendaval de mortificaciones, fue porque nosotros lo motivamos, no hay de otra más que frenar la maquinaria, sentarnos y comenzar a analizar las cosas… desde como se motivo, que pasó y buscar soluciones para enfrentarlo y superarlo… jamás quedarnos como espectadores de nuestras fallas, aplicarnos y corregirlas
Debemos ser responsables hasta de nuestros días malos, no dejarlos que sigan un curso que no es el conveniente para nuestra tranquilidad física o emocional.
No hay nada que deba desviarnos de nuestro cometido en esta tierra, ni nosotros mismos aunque seamos dueños de nuestra vida… porque???, pues porque no es lo que nos merecemos, por más deprimidos o acongojados que nos sintamos.
Creo firmemente en que el ser humano puede llevar una vida plena y equilibrada, ausente de problemas intrascendentes y complicaciones, más no por ello ajena de responsabilidad y verdadero sentido de elocuencia.
Por ello, este es un llamado a todos aquellos que han tenido o tienen un mal día, recuerden que todo pasa, y también este día se irá, y tendremos la posibilidad de, que si miramos atrás, podremos soltar sonora carcajada por el drama que hicimos de un día que no fue tan malo, solo un poco desajustado.
No hay días malos, solo falta de paciencia para enfrentarlos…. No lo olviden…. Y si de plano dicen ya no puedo soportarlo, solo digan Dala i i i i i i i i y todo estará mejor… por lo menos así dice el comercial j eje je.
Afortunadamente para nosotros pero para desgracia de otros, nuestros días malos jamás se podrán comparar con los de quienes de verdad la están pasando mal, o como día mi hermano, “siempre hay uno mas amolado que nosotros”; pero es esa costumbre nefasta de maximizar las cosas y decir, ¡¡¡ no hay peor desgracia que la mía!!! o ¡¡¡ maldita suerte ¡!!, nos llega de mal humor y lo único que conseguimos es atraer más y más y más problemas, por que al no ocupar nuestra mente en lo realmente importante, vivimos el día, o la semana, o los meses o los años, lamentando nuestras desgracias, nuestras represiones, nuestras necesidades y hasta nuestra vida, como si esta no fuera tan valiosa como para agradecerle aunque sea de vez en cuando lo que nos ha brindado.
No puedo entender como hay personas que viven así por siempre, mis respetos pero se pierden la oportunidad de poder gozar del día a día, de las cosas magnificas que el mundo tiene y que la gente puede ofrecernos.
Momentos o días malos los tendremos siempre, hasta que seamos capaces de enfrentarlos y manejarlos con la debida conciencia de que en ellos no se basa nuestra existencia, son solo instantes en los que la situación se nos salió control, voluntaria o involuntariamente….
Cuando estos problemas han sido motivados por circunstancias externas uno, pues no queda más que esperar a que las cosas se encaucen y tomen su ritmo para entrar en acción, talvez será necesario acelerar el paso para poder cumplir las metas y salir a flote con obligaciones establecidas.
Pero cuando todo ese vendaval de mortificaciones, fue porque nosotros lo motivamos, no hay de otra más que frenar la maquinaria, sentarnos y comenzar a analizar las cosas… desde como se motivo, que pasó y buscar soluciones para enfrentarlo y superarlo… jamás quedarnos como espectadores de nuestras fallas, aplicarnos y corregirlas
Debemos ser responsables hasta de nuestros días malos, no dejarlos que sigan un curso que no es el conveniente para nuestra tranquilidad física o emocional.
No hay nada que deba desviarnos de nuestro cometido en esta tierra, ni nosotros mismos aunque seamos dueños de nuestra vida… porque???, pues porque no es lo que nos merecemos, por más deprimidos o acongojados que nos sintamos.
Creo firmemente en que el ser humano puede llevar una vida plena y equilibrada, ausente de problemas intrascendentes y complicaciones, más no por ello ajena de responsabilidad y verdadero sentido de elocuencia.
Por ello, este es un llamado a todos aquellos que han tenido o tienen un mal día, recuerden que todo pasa, y también este día se irá, y tendremos la posibilidad de, que si miramos atrás, podremos soltar sonora carcajada por el drama que hicimos de un día que no fue tan malo, solo un poco desajustado.
No hay días malos, solo falta de paciencia para enfrentarlos…. No lo olviden…. Y si de plano dicen ya no puedo soportarlo, solo digan Dala i i i i i i i i y todo estará mejor… por lo menos así dice el comercial j eje je.
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