Ayer vi una jauría de perros mordiendo a diestra y siniestra… eran uno gordo y dos flacos… eran café claro con manchas café oscuro…. Estaban ahí en la esquina al asecho… sus filosos colmillos se veían desde el segundo piso en donde yo atónita los veía cometer con saña su agresiva acción.
Los vi actuando con sigilo, frotándose las patas, de sus hocicos escurría baba que caía hasta el suelo… estaban hambrientos y solo esperaban una víctima que saciara su instinto animal.
Bajaron de la patrulla 208 de la Dirección de Tránsito Municipal…. Con papeles en mano… 1, 2, 3, 4, autos infraccionados por no estar estacionados en lugar correcto… es verdad infringieron la ley, violaron el reglamento y en cumplimiento a los estatutos que marca el mismo, deberían haber pagado las consecuencias, en este caso la multa.
Bien dicen que no hay corrupción sin que alguien la provoque, acepte y solape… y así sucedió, porque de pronto los 3 tránsitos mordelones levantaron sus antenas y se vieron rodeados de 3 sujetos que de las oficinas de gobierno que están a un costado de mi oficina bajaron pidiendo la celestial clemencia.
Uno llego erguido, con la espada desenvainada, en este caso con la mano estirada y en la mano un billetito que por la lejanía no vi de cuanto era, pero si observe cuando uno de los tránsitos, el más chaparro, llevo su mano al bolsillo guardando el preciado botín…. ¡¡¡ sació su apetito ¡!!... acto seguido recogió la papeleta la doblo y procedió a colocarla en la tabla que llevaba en la mano… acto seguido el irresponsable automovilista se fue.
Un tránsito más atendió a otro sujeto muy bien vestido… este se afanó hablando con el, haciendo señas como que ¡¡¡ venia de arriba!!! Desde el consejo de seguridad pública estatal… el transito como queriéndose ver muy eficiente e impedido para morder, tomó su celular, hizo la llamada, colgó, y retiro la papeleta blanca que ya estaba en el parabrisas de la lujosa camioneta… acto seguido el tipo bien vestido se fue no sin antes darle una palmadita en la espalda.
El otro estaba con un señor bajito que parecía Mario Bros… también venía de ¡¡¡ arriba ¡!!, hablaron, le sobaba el hombro como pidiendo disculpas y diciendo que no lo haría de nuevo, que después de eso tendría ganado un ascenso y entrego el papel, mientras el tránsito colocaba la placa de nuevo en su lugar… ¡¡¡hasta eso!!!
Uno gano dinero, los otros mostraron su servilismo, mientras que la camioneta blanca seguía con la multa en el cristal… ni modo, nadie fue a reclamar.
Y de pronto ahí va doña chori (es la señora que vende fruta en la banqueta, en verdad se llama Carmen pero como inició vendiendo chorizo, de cariño le decimos doña chori) va corriendo a entregar dos bolsas de sandía con mango, una pizca de limón, chile y limón…. Se las entrega y el tránsito que iba como representante de los otros dos le dijo adiós y agradeció el amable gesto.
Y es que doña chori también tenia su auto en doble fila, y a el fin de no ser multada les regalo 34 pesos (porque cada bolsa de fruta cuesta 17 pesos) que bien pudieron servir para comprar la leche y los huevos para el desayuno de mañana…. Pero como la multa le pudo salir más cara, pues son 34 pesos.
Ahí la obra de la jauría de perros…. Perros, perros, perros, igual muerden al rico que al pobre, igual se hacen de la vista gorda cuando va un carro sospechoso a toda velocidad, y es que no vaya siendo un matón que los agarre como han agarrado a otros y ahí mismo se los quiebran… no vaya siendo que por querer sacar 20 pesos, consigan la muerte.
Que deprimente escena, que decepcionante, que triste… pero bueno, a falta de verdadera ética, de verdadero sentido del cargo, o de mejor salario, o de miedo, prefieren corromperse a pasar a ser parte de la lista de pobres o muertos que tiene nuestro estado.
Doña chori creo que fue la que más salio perdiendo o ganando… 34 pesos, una sonrisa y a seguirle dando a su trabajo… por cierto les recomiendo su fruta, es limpia, barata, fresca, la prepara muy rico y se gana el dinero honestamente bajo los rayos del sol para pagar su vida y también mordidas.
Dios, porque nos permites fomentar la corrupción… porque definitivamente no son los tránsitos ni ninguna otra autoridad los de la culpa… somos nosotros quienes la permitimos y solapamos…. Haber, porque no decirle al tránsito ¡¡¡ hágame la boleta, me lo merezco!!! E ir a pagar para que se nos quite por irresponsables???.
Solo espero que esto no ocasione que doña chori nos aumente el precio de su rica fruta, porque entonces la ración de piña con sal que me como diariamente tendrá que suspenderse.
Los vi actuando con sigilo, frotándose las patas, de sus hocicos escurría baba que caía hasta el suelo… estaban hambrientos y solo esperaban una víctima que saciara su instinto animal.
Bajaron de la patrulla 208 de la Dirección de Tránsito Municipal…. Con papeles en mano… 1, 2, 3, 4, autos infraccionados por no estar estacionados en lugar correcto… es verdad infringieron la ley, violaron el reglamento y en cumplimiento a los estatutos que marca el mismo, deberían haber pagado las consecuencias, en este caso la multa.
Bien dicen que no hay corrupción sin que alguien la provoque, acepte y solape… y así sucedió, porque de pronto los 3 tránsitos mordelones levantaron sus antenas y se vieron rodeados de 3 sujetos que de las oficinas de gobierno que están a un costado de mi oficina bajaron pidiendo la celestial clemencia.
Uno llego erguido, con la espada desenvainada, en este caso con la mano estirada y en la mano un billetito que por la lejanía no vi de cuanto era, pero si observe cuando uno de los tránsitos, el más chaparro, llevo su mano al bolsillo guardando el preciado botín…. ¡¡¡ sació su apetito ¡!!... acto seguido recogió la papeleta la doblo y procedió a colocarla en la tabla que llevaba en la mano… acto seguido el irresponsable automovilista se fue.
Un tránsito más atendió a otro sujeto muy bien vestido… este se afanó hablando con el, haciendo señas como que ¡¡¡ venia de arriba!!! Desde el consejo de seguridad pública estatal… el transito como queriéndose ver muy eficiente e impedido para morder, tomó su celular, hizo la llamada, colgó, y retiro la papeleta blanca que ya estaba en el parabrisas de la lujosa camioneta… acto seguido el tipo bien vestido se fue no sin antes darle una palmadita en la espalda.
El otro estaba con un señor bajito que parecía Mario Bros… también venía de ¡¡¡ arriba ¡!!, hablaron, le sobaba el hombro como pidiendo disculpas y diciendo que no lo haría de nuevo, que después de eso tendría ganado un ascenso y entrego el papel, mientras el tránsito colocaba la placa de nuevo en su lugar… ¡¡¡hasta eso!!!
Uno gano dinero, los otros mostraron su servilismo, mientras que la camioneta blanca seguía con la multa en el cristal… ni modo, nadie fue a reclamar.
Y de pronto ahí va doña chori (es la señora que vende fruta en la banqueta, en verdad se llama Carmen pero como inició vendiendo chorizo, de cariño le decimos doña chori) va corriendo a entregar dos bolsas de sandía con mango, una pizca de limón, chile y limón…. Se las entrega y el tránsito que iba como representante de los otros dos le dijo adiós y agradeció el amable gesto.
Y es que doña chori también tenia su auto en doble fila, y a el fin de no ser multada les regalo 34 pesos (porque cada bolsa de fruta cuesta 17 pesos) que bien pudieron servir para comprar la leche y los huevos para el desayuno de mañana…. Pero como la multa le pudo salir más cara, pues son 34 pesos.
Ahí la obra de la jauría de perros…. Perros, perros, perros, igual muerden al rico que al pobre, igual se hacen de la vista gorda cuando va un carro sospechoso a toda velocidad, y es que no vaya siendo un matón que los agarre como han agarrado a otros y ahí mismo se los quiebran… no vaya siendo que por querer sacar 20 pesos, consigan la muerte.
Que deprimente escena, que decepcionante, que triste… pero bueno, a falta de verdadera ética, de verdadero sentido del cargo, o de mejor salario, o de miedo, prefieren corromperse a pasar a ser parte de la lista de pobres o muertos que tiene nuestro estado.
Doña chori creo que fue la que más salio perdiendo o ganando… 34 pesos, una sonrisa y a seguirle dando a su trabajo… por cierto les recomiendo su fruta, es limpia, barata, fresca, la prepara muy rico y se gana el dinero honestamente bajo los rayos del sol para pagar su vida y también mordidas.
Dios, porque nos permites fomentar la corrupción… porque definitivamente no son los tránsitos ni ninguna otra autoridad los de la culpa… somos nosotros quienes la permitimos y solapamos…. Haber, porque no decirle al tránsito ¡¡¡ hágame la boleta, me lo merezco!!! E ir a pagar para que se nos quite por irresponsables???.
Solo espero que esto no ocasione que doña chori nos aumente el precio de su rica fruta, porque entonces la ración de piña con sal que me como diariamente tendrá que suspenderse.
No hay comentarios:
Publicar un comentario